El Sindicato de Trabajadores de Prensa (SITRAPREN), Personería Gremial N° 1880, pone de manifiesto -como representante de todos los trabajadores de la Agencia Télam S.E.- que bajo ninguna circunstancia aceptará la utilización y discriminación de los compañeros, sea cual sea el lugar en el que se encuentren realizando funciones y sea quien sea el que intente hacerlo.

 

Tal como lo advertimos en reiteradas oportunidades, el único fin de algunos individuos en la Agencia parece ser utilizar a los trabajadores en beneficio propio y no del conjunto.

 

En esta oportunidad queremos poner en evidencia cómo el abogado Mariano Suárez “representa” a los compañeros del Interior del país que trabajan en Télam S.E., situación que quedó reflejada cuando realizó la presentación de “impugnaciones” en 2014 contra el pedido de Personería Gremial del SITRAPREN, las cuales no prosperaron debido a la falacia e inconsistencia de sus argumentos.

 

En ese momento, uno de sus fundamentos fue: Que el SITRAPREN no reunía el 20% del universo de trabajadores de Télam S.E., para lo que alegaba –arrogándose la representación de la UTPBA- que los compañeros de las corresponsalías del interior del país no pertenecían al ámbito de aplicación que se buscaba cotejar, rechazando lo determinado por el Ministerio de Trabajo que sostenía como “cumplidos los requisitos establecidos en el art. 25 inc b) de la Ley 23.551”.

 

Pese a ello, Suárez insistía con su discriminación hacia los compañeros corresponsales, y pretendía justificar que Télam se hallaba en 24 jurisdicciones territoriales distintas.

 

Cabe señalar, que esta exclusión es realmente grave, ya que los corresponsales están en un todo comprendidos en el universo de trabajadores de Télam S.E.

 

Esto es así ya que las corresponsalías dependen en todo sentido –económico, organizativo y funcional- de la oficina central en Buenos Aires, al punto que los alquileres de las mismas y todos los servicios se pagan desde la sede en CABA. Es decir, los corresponsales trabajan en distintos lugares pero para una empresa radicada en una única ciudad.

 

Sin embargo, Suárez buscaba conseguir que no se los contará como personal de Télam S.E. por no trabajar en Bolívar 531, con el debido peligro que llevaba implícito el hecho de dejar aislados a los compañeros corresponsales, a quienes no sólo se los discriminaba sino que se solicitaba que no contarán con el reconocimiento de pertenecer a una misma empresa, convirtiéndolos en meros colaboradores o freelance.

 

Para tranquilidad de los compañeros este pedido fue revertido por el SITRAPREN en el Ministerio de Trabajo, y como debe ser los corresponsales que trabajan en todo el territorio argentino saben que cuentan para la defensa de sus derechos con el SITRAPREN, cuyo secretario general, compañero Lucho Giménez, siempre estuvo, está y estará atento y pendiente de ellos, como lo hace con todos los trabajadores, sin discriminación alguna.

 

En este sentido, no pueden decir lo mismo quienes sólo aparecen cuando hay una elección en Télam Central o, como sucede ahora, cuando por necesidad personal pretenden afiliarlos a un “sindicato de actividad con simple inscripción”.

 

¿Qué les pasó? ¿Entendieron que los corresponsales pertenecen al ámbito de Télam S.E.?

Ayer los discriminaban y abandonaban, hoy los necesitan para sumar afiliados a un sindicato de actividad con simple inscripción. De más está pensar ¿Qué posición tomarían ellos en un conflicto?

 

Las actitudes camaleónicas de ciertos individuos ya no sorprenden. Sobran los ejemplos, como ser cuando denunciaban -en 2014- que el consejo o sugerencia de afiliarse a un gremio constituía una amenaza.

 

Ahora, con una representación que no poseen y que el mismo Suárez reconoció en el Tribunal de Ética del Colegio de Abogados, convocan a todos los trabajadores de Télam a afiliarse a un “sindicato de actividad con simple inscripción” con el fin de “sostener las fuentes de trabajo”. Como podrán ver, las miserias humanas no tienen límites, y más temprano que tarde salen a luz.

 

El SITRAPREN, siendo el único Sindicato con personería gremial en ejercicio en Télam S.E. y representante de todos sus trabajadores, rechaza en absoluto la utilización de los compañeros de la Agencia, a quienes se pretende aglutinar mediante la estrategia del miedo.

 

Para ello, utilizan un relato equívoco de la liquidación y disolución de Télam durante el gobierno de la Alianza, debido a que no dirigieron o formaron parte de esa lucha. Es más, uno de ellos compartía almuerzos y cenas con Lopérfido, el encargado de disolver la Agencia.

 

Compañeras y compañeros, como siempre el SITRAPREN garantiza la defensa de la fuente laboral y los derechos y conquistas, conseguidos por la buena conducción y gestión de nuestros dirigentes. A la vez que, tal como lo hizo en 2001, será quien que levante la bandera de la lucha contra aquellos que pretendan llevar adelante alguna medida que atente contra los trabajadores y sus derechos.

 

Comisión Directiva

 

Buenos Aires, 02 de enero de 2016

Por sitrapren