El Sindicato de Trabajadores de Prensa (SITRAPREN), Personería Gremial N°1880, repudia y rechaza la actitud de los directivos de Télam S.E. para justificar el intento de despido de la trabajadora Andrea Holgado, del área Audiovisuales, y lamenta los términos utilizados en un comunicado oficial difundido a través de Intranet, los cuales vislumbran un comportamiento reñido con las leyes y lo estipulado por la Constitución Nacional en su artículo 14 bis.
Cabe señalar, que luego de tomar conocimiento de la situación el viernes, el SITRAPREN intentó comunicarse con el Vicepresidente del Directorio, Ricardo Carpena, y el vocero Carlos Rosendo Villoldo, pero ninguno contestó los llamados. Sí lo hizo la subgerenta del Área Audiovisuales, Magdalena Cash, quien -al ser consultada telefónicamente por este Sindicato- nunca habló ni de amenazas ni de negativa a trabajar de la compañera, su única respuesta fue que “el tema excedía a su subgerencia, que habláramos con Luis Quinteiro, Gerente de Recursos Humanos, o el Directorio”.
Por ello, resulta llamativa la versión comunicada hoy por las autoridades de Télam, quienes además aducen que la compañera Holgado “llegó a amenazar al gerente de Personal, a empleados de ese sector y a una integrante de la Gerencia de Legales”, motivo por el cual creemos que habrán realizado la denuncia en el lugar correspondiente.
Asimismo, queremos dejar en claro que no aceptaremos «advertencias» o recomendaciones de directivos que se manejan en forma inorgánica y llevan adelante el vaciamiento de nuestra agencia de bandera, quienes a sabiendas de la preocupante situación que vive el país y en particular el gremio de Prensa, optan por dejar a una madre sin trabajo.
Lo último que vamos a hacer es dejar de defender a una trabajadora a la que pretenden dejar sin el pan diario para llevar a su familia, a lo que se suma los muy recientes fallecimientos de la pareja de la compañera y del padre de su hijo, situación conocida por los directivos de la empresa, que lo único que buscan es transformar en «ñoquis» a los empleados de Télam para forzar su achicamiento y desguace.
Es precisamente el Estatuto del Periodista – Ley 12.908- al que se refiere la empresa el mismo que utilizó el presidente, Rodolfo Pousá, para cobrar indemnización tras su triste paso por el gobierno de la Alianza, sabiendo que no le correspondía ya que ejercía como funcionario y no como periodista.
Lamentamos profundamente la actitud antisindical y persecutoria del directorio de la empresa y del Gerente de Recursos Humanos. La diferencia entre ustedes y nosotros radica principalmente en que ustedes –en su función patronal- siempre “encuentran” una situación factible de una “desvinculación con causa”, mientras que nosotros únicamente vemos a un/a compañero/a que se queda en la calle.
COMISION DIRECTIVA
2016-2020
Buenos Aires, 5 de junio de 2016