El Sindicato de Trabajadores de Prensa (SITRAPREN) rechaza de plano el ingreso de personal “designado a dedo” en la Redacción de Télam Sociedad del Estado por tratarse de un hecho que a todas luces es violatorio de las leyes vigentes, y que representa no sólo un grave antecedente en cuanto a la destrucción del escalafón periodístico, sino también el desprecio hacia los periodistas de carrera de la agencia, que ven así pisoteada su trayectoria y capacidad.
El ingreso de al menos diez personas designadas con categoría de Prosecretario General de Redacción (la segunda más alta del escalafón) o con categorías inexistentes aunque realizan tareas descriptas por el Estatuto del Periodista y el Convenio Colectivo de Trabajo 301/75, se concretó evadiendo dicha normativa laboral y los acuerdos paritarios vigentes, dado que no se realizó mediante Concurso ni se dio oportunidades a los trabajadores de carrera, pese a que afectan directamente la masa salarial y, por consiguiente, el erario público.
Este proceder tiene como responsables directos al vicepresidente del Directorio, Ricardo Carpena, y al Gerente Periodístico, Carlos Russo, ya que ellos en persona dieron instrucciones a la empresa de vigilancia para autorizar el ingreso de estas personas, las cuales no fueron nombradas ni designadas de acuerdo a la normativa vigente.
Sin embargo, debe destacarse que el hecho más grave lo representa la subestimación y el ninguneo hacia los periodistas de carrera de la Redacción, ya que el nombramiento de estos «jefes del jefe» es un oscuro precedente sobre la capacidad y la experiencia de los responsables y editores de cada sección, los que deben parecer «niños de primaria» a los ojos de estos funcionarios.
Al mismo tiempo, estos ingresos fuera de la ley representarán una “nueva gran capa geológica» en Télam, relegando una vez más las posibilidades de crecimiento profesional y salarial de los periodistas de la Redacción, con la única y evidente intención de controlar políticamente el servicio periodístico o ayudar a algún «amigo sin laburo».
El SITRAPREN realizó, como sindicato con Personería Gremial, una denuncia ante el Ministerio de Trabajo de la Nación y presentó una nota sobre el tema al titular del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, al tiempo que solicitó explicaciones por la misma vía al vicepresidente Carpena.
Cabe destacar que los funcionarios están obligados a informar al Sindicato con Personería Gremial de los movimientos de Personal en la empresa, algo que evidentemente este señor desconoce.
En tanto, lo descripto no debería contar con la complicidad de los propios trabajadores del área Periodística, donde pseudo dirigentes han llevado con su egoísmo e incapacidad a esta tremenda situación, que hace que el vicepresidente del directorio y el gerente periodístico -apañados por distintos gerentes de área- tengan la posibilidad de meter “amigotes” mientras en la calle hay un montón de argentinos que no pueden llevar un plato de comida a sus familias.
Aquellos que se dejen arrastrar por el «canto de sirenas» de estos improvisados pagará caro su equivocación, ya que el sobredimensionamiento de un área abre una peligrosa puerta al infierno del achicamiento, del cual los trabajadores de Télam ya aprendimos que no hay retorno, y del que no seremos responsables quienes ahora nos estamos enfrentando a este despropósito.
Los trabajadores de Télam S.E. -los que verdaderamente sacamos adelante en conjunto el mejor y más grande servicio de noticias del país- no vamos a dejar que se avasallen nuestros derechos y se menosprecie de esta manera nuestra capacidad profesional, por lo que llevaremos adelante todas las medidas que se consideren necesarias para echar por tierra este tipo de desmanejos políticos y presupuestarios en nuestra querida Agencia, ya sea en el plano Sindical, Político, Judicial y/o Legislativo, que son las cuatro patas en las que debe apoyarse la resolución de un conflicto.
COMISION DIRECTIVA
Buenos Aires, 9 de abril de 2016